Éramos 9 hermanos. Los últimos nacieron hace 55 años. Eran un par de mellizos: uno muy rubio, por lo que fue apodado "Rubito" y el otro, aunque no era morocho, por el sólo hecho de que su mellizo era muy rubio fue apodado "Negrito". El rubito, tal vez por parecerse tanto a un angelito, Dios decidió llevarlo de nuevo para cumplir ese rol allá arriba, nos abandonó con apenas 4 meses.
Los mellizos tenían preparado desde antes de nacer un cochecito rojo gemelar, o sea con dos camitas. Mamá quedó tan mal que papá hizo alzar en el altillo del depósito el carrito, para que no le recuerde a ella ese dolor de ver un lado vacío. Yo no entendía que pasó con el rubito, sólo me decían que se fue al cielo, y en mi inocencia de 3 añitos le imaginaba volando por las nubes. La que sí era consciente de donde estaba realmente el rubito, era mi pobre y sufrida mamá, que no dejaba de llorar en cada atardecer. Era como que el ocaso le revivía ese dolor tan entrañable, que sólo puede sentir una madre por la muerte de un hijo. Cada vez que moría el sol un poco de ella moría. Abuela, su madre, en su afán de a apaciguar su dolor y a modo de darle ánimos le decía que Dios le dio 2 hijos de una vez porque sabía que uno volaría pronto, y que el que quedaba sería doblemente inteligente, guapo, creativo y bendecido... todo sería doble en él. Negrito, que con los años pasó a convertirse en NEGRO, hoy cumple 55 años, y las palabras de abuela Ana hoy parecen una profecía, pues aunque todos mis hermanos son habilidosos e inteligentes, mi hermano el benjamín (el pahagüe de la casa) es realmente asombrante!
Desde chico fue como una enciclopedia, ahora es como ese libro de "Como hacerlo tú mismo" pues tiene una increíble capacidad para poder responderte sobre el uso de un condimento, de una herramienta, un instrumento o lo que sea que le peguntes. Quien lo conoce sabe que su profesión, por el título universitario es "abogado".. pero él es también: arquitecto, ingeniero, ebanista, escultor, escritor, pintor, hojalatero, herrero, cocinero, carpintero, repostero, electricista, albañil, zapatero, enfermero, médico.... no terminaría NUNCA de citar todo lo que es capaz de hacer. Puedo resumirlo en decir la palabra de como le llamaba un constructor de Antequera: " MAESTRO". Ahora le llaman "el Roa Bastos antequereño" en el Facebook, por la habilidad de su pluma para los relatos... para mi sencillamente es un maestro, pues tantas cosas he aprendido de él, y me imagino que siempre aprenderé de él, y le estaré consultando cuando tenga que realizar cualquier cosa. Lo último que me ayudó a decidir es la construcción para levantar mi muralla con el vecino... ideado y diseñado por él!, con materiales tan buenos como económicos (porque es un maestro turco), y por supuesto realizados con un toque de su propio trabajo y con sus propias herramientas, pues no creo que exista en este mundo alguien que tenga tantas herramientas como él! Ahí tambièn fue "maestro" de mi albañil. Hoy, en el este día en que se recuerda el nacimiento de los mellizos, con la confianza de que el Rubito es un angelito que lo cuida desde el cielo, agradezco a Dios por la calidad de hermano que me dejó en la tierra, no será un angelito (tal vez "argelito" le quede mejor) pero en verdad estoy muy orgullosa de él y muy agradecida por todas las veces que me ayudó a solucionar mil problemas de todo índole...pues para eso es ....UN MAESTRO!! FELIZ CUMPLEAÑOS NEGRO!!! Dios te bendiga siempre
Comments